Como cada año, ha quedado instalado en el presbiterio de la parroquia el altar para la celebración del solemne septenario doloroso y en cuya cima se alza el calvario formado por el Cristo de la Vera-Cruz y la Virgen de los Dolores. Este año se ha incluido en el montaje la custodia de la extinguida hermandad sacramental (S.XIX) para colocar en ella al Santísimo, al igual que se hizo los años 1992 (V Centenario de la Evangelización de América y 2000 (Año Jubilar). La custodia, coronada por la estatua de la Fe (siempre con la cruz en la mano y con los ojos vendados) recuerda que por la Fe se llega al Sacramento Eucarístico, plenitud y vida de la iglesia, donde Cristo se hace presente de forma real. Este año 2012, en el que comenzará el Año Internacional de la Fe a partir de octubre, debe ser una ocasión para la reflexión sobre nuestra Fe, su solidez ó debilidad y sobre la formación y la vivencia litúrgica y sacramental que requiere para alimentarse y fortalecerse continuamente.
El altar se completa con detalles eucarísticos como la uva y el trigo, el Cordero Apocalíptico y las "sacras" con el texto en latín de la Eucaristía; la yedra que simboliza la eternidad y que parte del árbol de la Cruz del Cristo; la cera encendida que recuerda la resurrección de Cristo y la devoción del pueblo; la ofrenda de este pueblo en forma de flores a los pies del altar,flores (siempre rojas a los pies de la Cruz) que han vuelto a colocarse según modelos de principios del siglo XX. Os invitamos a adorar al Señor durante estos días, a escuchar su palabra, a orar y contemplar los Dolores de su Madre al Pie de la Cruz.
